Nos fuimos a comer con mi abuelo, y como no os he contado aún donde nos gusta ir os comento que al restaurante Magic FantasyYendo de camino nos encontramos a mi abuelo que ya iba conduciendo, y venía en dirección a recogernos con el coche.

Restaurante Magic Fantasy
Restaurante Magic Fantasy

POR FIN TENGO EL COLGANTE

Al llegar allí nos bajamos del automóvil y mi abuelo y yo fuimos los primeros en coger una mesa, mientras mi abuela pedía la comida. Yo empecé el plan que ya habíamos planeado para hoy, así que le dije a mi abuelo - abuelo, la abuela me ha guardado un colgante ¿me lo das de su bolso, por favor?. A lo que él me contestó - pues claro, aquí tienes Sally.

Así hizo mi abuelo ya que me lo dio, y me lo guardé enseguida en el bolsillo del vestido con cuidado de que no se me cayese. A los tres minutos abuela se sentó en la mesa. Yo en esos momentos me encontraba con un gotero de sudor, ¡y todo por el miedo! porque temía que mi abuelo le contase a mi abuela que me había dado el colgante. 

Mi abuela al verme me preguntó si estaba enferma, a lo que yo le contesté que no, que sudaba porque tenía mucha calor, pero en realidad era porque estaba muerta de miedo. Mi abuelo también se preocupó por mí, así que también quiso saber - ¿Sally estás bien? ¿no te encuentras mal? Yo me quedé pensativa y les contesté - abuelo, abuela, estoy completamente bien lo que pasa es que estoy nerviosa porque nunca he estado en el centro comercial. Al cabo de unos segundos, las caras de mis abuelos quedaron muy relajadas al escucharme decir eso.

ALMORZAMOS EN EL MAGIC FANTASY

Ufff..... Qué alivio de que no se enteraron de la verdad. Al cabo de cinco minutos llegó el primer plato. Mi abuela se acabó pidiendo una sopa de verduras especial y mi abuelo una sopa Magic. Y si tal vez os preguntáis que es eso, os puedo decir que es una sopa normal, aunque lleva todas las verduras mezcladas con arroz, ¡es una de mis favoritas! Yo también había pedido lo mismo que mi abuelo.

Terminamos los platos y llegó el segundo. En este caso mi abuela pidió una ensalada, mi abuelo queso empanado con patatas al horno, y yo una hamburguesa de berenjenas con zanahorias fritas, que es como las patatas fritas pero en vez de ser patatas son zanahorias, están de rechupete.

Nos terminamos el segundo plato y pedimos el postre. Mi abuela quiso un helado en copa, con nata y fideos de colores. Mi abuelo se pidió un flan y yo por supuesto me pedí un cupcake de arco iris. Toda esta comida nos costó 35 €.

EL HILO PLATEADO Y LA CASA ANTIGUA

Después de comer, nos dirigimos directamente los tres juntos caminando hacia la tienda de deportes, y de camino hacia allí volví a ver ese hilo plateado. Lo curioso es que esta vez se adentraba en unas de las casas más antiguas y abandonadas de la ciudad. Yo estaba aterrorizada, no sabía si entrar en ella.

Casa abandonada
Casa abandonada 

             Google +   Twitter   Facebook
COPYRIGHT © SCARLETT PATRIC
Foto Por Cortesía: Pinterest